Logroño acoge una jornada con la presión fiscal y la demanda de una mayor flexibilidad de producto en la oferta de las salas como grandes argumentos.
La fiscalidad sigue siendo la gran asignatura pendiente del empresariado del Bingo. Ayer volvió a ponerse de manifiesto en las intervenciones de sus representantes.
Sin que desde las Administraciones intervinientes se negara la mayor. Incluso un regulador sin competencias sobre este punto como Aitor Uriarte se pronunció inesperadamente con vehemencia al respecto. «A todo el sector del Juego habría que darle una vuelta a la fiscalidad. ¡Ojo! Tal afirmación no significa que la presión fiscal tenga que ser la misma para todos», aclaró.
El presidente de CEJ, Fernando Henar, se congratula que «hayamos logrado que exista conciencia sobre el tema fiscal ante una tasa tan desmesurada» (…) «Unos lo solucionan y otros no. Vendemos entretenimiento, ocio, divertimento. Vendiendo esas capacidades, aplaudo la iniciativa de la DGOJ en favor de reducir la presión fiscal en el Online. Todo lo que supere el 10% es un error».
La reguladora de Juego de Castilla-La Mancha, Susana Pastor, aúna en su departamento la vertiente fiscal. Se expresó contraria a una armonización en ese terreno.
Jesús Serrano en sus conclusiones también lo abordó, lamentando en paralelo que las peticiones fiscales «no pueden demorarse hasta cuatro años en su adopción».
Pero en la demanda empresarial expuesta ayer en Logroño también hubo claras reflexiones sobre las cosas buenas y compromisos que en materia de ‘juego responsable’ viene desplegando este sector. Juan José Sánchez fue muy explícito en la intervención de la primera mesa redonda, pero Serrano se explayó también en sus conclusiones sobre el particular. «Tenemos estrictos requisitos y controles de acceso desde hace más de 40 años. Llevamos desarrollando políticas de formación y responsabilidad social corporativa desde hace años. Tenemos unos estrictos controles horarios y aperturas y cierres», concretó.
Henar también pidió posibilidad de aumentar el parque de máquinas de las salas. «Nos encontramos con la paradoja que el parque de máquinas en Salones aumenta, pero no así en Bingos, que somos más responsables y mantenemos controles de acceso más rigurosos» (…) «Hay 4 comunidades que sólo permiten colocar 1 máquina multipuesto de ocho posiciones, mientras en otros establecimientos vemos crecer la oferta de máquinas multipuesto», señaló el presidente de CEJ.